El fin de semana hemos tenido unas elecciones que nos colocan nuevamente en una encrucijada. Es muy preocupante el convencimiento de algunos sectores de nuestra población para aceptar un discurso ideológico que tanto daño le ha hecho a nuestro país, y a muchos otros países. Incluso con el terrorismo que cobró la vida de miles de peruanos. Estos resultados creo yo que reflejan nuestra fragilidad de memoria histórica, la poca reflexión y el poco análisis sobre la visión de futuro que nos espera. También refleja que todos, desde donde estamos, podemos contribuir mucho más a reducir las grandes brechas de desigualdad que aún existen en el país y que causan tal malestar que optamos por promesas inviables de un aparente cambio, aún sabiendo que estas han sido nefastas para otros países.
Aquí no se trata de llorar sobre la leche derramada, se trata de proponer alternativas de mejora, y propuestas de trabajo para que, en todos los sectores, se puedan reducir las brechas. Es por ello que, al margen de estos resultados, con un grupo de líderes de los principales sectores económicos, hemos emitido nuestras opiniones sobre lo que urge trabajar en el país. Unamos fuerzas y trabajemos por un mejor país. Sé que muchos somos creyentes de que nuestro país puede salir adelante con un capitalismo consciente. Asegurémonos de practicarlo.
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