Todos los CEO corporativos, altos ejecutivos y otros líderes empresariales dicen que quieren creatividad y necesitan una innovación real para prosperar en un mundo competitivo. Pero según la sorprendente investigación de la ex profesora de gestión de Wharton Jennifer Mueller, la verdad es que muchos líderes empresariales rechazan crónicamente las soluciones creativas y, a menudo, aceptan lo familiar, incluso cuando profesan compromiso con la innovación. Las investigaciones de Mueller también revelan que no solo los CEO, sino también los educadores, científicos y muchos otros que a menudo luchan por aceptar ideas nuevas y creativas, incluso cuando así lo desean. Mueller analiza las preguntas difíciles que estos hallazgos plantean. ¿Podrían las personas amar pero también odiar las ideas creativas? ¿Podría la mentalidad que utilizamos para evaluar ideas encender o apagar este amor u odio en un instante? ¿Los expertos luchan incluso más que los novatos con este sesgo? Y aún más sorprendente, ¿podrían las «mejores prácticas» que las organizaciones emplean para gestionar la innovación activar este sesgo e, inadvertidamente, matar la innovación? Mueller diagnostica esta barrera de innovación oculta y proporciona soluciones, que incluyen:
Un proceso de cuatro pasos (y una quinta línea de vida) para auto interrumpirse su mentalidad actual y reconocer la oportunidad creativa; un marco de presentación de ideas destinado a ayudarlo a superar la pegajosa preferencia de otras personas por el status quo; palancas organizacionales clave para interrumpir las creencias culturales que retienen a su empresa; sugerencias para reconocer con mayor precisión a los líderes creativos que pueden guiar a las organizaciones en nuevas direcciones productivas, y estrategias para generar ideas sin dañar su capacidad de hacerlas contar con los que toman las decisiones.
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