La pandemia forzó radicalmente el cambio en muchos sectores de nuestra economía. Modificó incluso los hábitos de consumo de los peruanos, nuestra forma de vivir y hasta de aprender. Como ya lo hemos mencionado en artículos anteriores, la mayoría de instituciones educativas peruanas tuvieron que adaptar su modelo educativo a un formato virtual. Otras, como la UPC, ya habíamos implementado la transformación digital hace diez años aproximadamente con resultados extraordinarios. Esta transición nos ha demostrado que la tecnología juega un papel importante en la formación de nuestras futuras generaciones.
No conocemos a ciencia cierta cuándo acabará la pandemia, esto es algo en que los expertos no se ponen de acuerdo, sin embargo, es un hecho que esta experiencia vivida en un formato 100% digital ha llegado para quedarse. Las instituciones educativas no volverán a ofrecer una educación completamente presencial, qué duda cabe. Las herramientas digitales se van a incorporar al sistema presencial, dando pie a una Educación Híbrida, definida como aquella que combina la educación tradicional con la virtual, creando modelos educativos más flexibles y acorde a las necesidades de nuestros tiempos.
Lo que se necesita para garantizar el éxito de este tipo de educación y su sostenibilidad en el tiempo, es la reforma del sistema educativo. Un liderazgo activo del nuevo presidente y su gabinete de ministros, un Poder Legislativo con voluntad de no obstruir las leyes que favorecen la Educación Híbrida, y el sector privado con todo su know-how e inversión tecnológica centrada en los estudiantes. Ni qué decir sobre ampliar las capacidades para que esta educación sea de la más alta calidad y auténticamente inclusiva, llegando a todos los rincones del país.
Un estudio de la Asociación Mexicana de Internet, establece que “más del 70% de los internautas tienen interés de aprender en línea, 30% de ellos optando por programas educativos híbridos”. Una tendencia claramente favorable que, de la misma manera en que se evidencia en México, terminará por adoptarse en todos los países de la Región.
Este modelo tiene amplios beneficios, pues aprovecha el uso de nuevas tecnologías para adaptarse a las necesidades de los docentes y permite conocer las fortalezas de cada estudiante para impulsar su crecimiento. Según un informe de la revista Forbes, la Educación Híbrida permite:
- Crear ambientes colaborativos entre los mismos estudiantes y recibir retroalimentación de los profesores a través de herramientas digitales.
- Tomar clases de forma sincrónica, es decir en tiempo real, o asincrónica, cuando se graba la clase en un medio digital para su posterior consulta.
- Impartir las clases de forma personalizada, colectiva o masiva.
- Crear contenidos más dinámicos y flexibles.
- Construir el ritmo de aprendizaje con la tutoría del profesor.
Yo le añadiría a este informe el poder tener acceso a profesores con los conocimientos específicos, aunque estén en otros países del mundo. El poder trabajar y estudiar de manera permanente que antes era muy complejo, el seguir siendo un deportista de élite, lo que implica muchos viajes, competencias, e incluso entrenamientos fuera del país. El poder trabajar fuera del país en algunos periodos dentro de tu carrera, sin tener que detener tus planes de estudio. Incluso, cuántos jóvenes del interior del país, optaron por la mejor educación, teniendo que venir a la capital a seguir sus estudios superiores, alejándose de sus ciudades, cuando ahora podrían seguir estudiando a distancia, y trabajar en sus regiones, aportando al desarrollo que tanta falta nos hace.
Por otro lado, permite incorporar otras herramientas novedosas como la Realidad Virtual, de la que ya hemos dedicado un artículo semanas atrás, la Realidad Aumentada, la Inteligencia Artificial y los sistemas cibernéticos, permitiendo que la educación se pueda automatizar y el aprendizaje se pueda escalar.
Sabemos que los formatos novedosos e innovadores siempre toman su tiempo de adaptación. Su implementación requiere el apoyo de todos nosotros, ya que la pandemia ha evidenciado que existen muchas brechas que debemos acortar como la falta de infraestructura tecnológica o los problemas de conectividad en el interior del país. Según la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho), 70.3% de la población peruana cuenta con acceso a internet, sin embargo, aún se necesita mejorar la velocidad de datos o mejorar las redes de 4G en el país.
La tecnología representa una oportunidad trascendental para el futuro de la educación. Las habilidades digitales son necesarias en un mundo que cambia vertiginosamente y que demanda nuevas competencias a los profesionales. Hace poco compartí en mis redes un video reporte del Foro Económico Mundial en las que se establecen las 10 habilidades del futuro del trabajo, ahí podemos darnos cuenta la imperiosa necesidad de implementar la Educación Híbrida para desarrollar estas habilidades. De esta manera, podemos asegurar una ruta confiable que nos asegure la recuperación económica y social del país en el mediano plazo. Confío en que así será.
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